Hacia el bienestar y la salud animal inteligentes
Tres son las tecnologías que están irrumpiendo con fuerza, como en otros sectores, en el de la salud animal. El internet de las cosas, que nos permite conectar objetos cotidianos con Internet, la Inteligencia Artificial, que permite el aprendizaje de los dispositivos y la generación de patrones de comportamientos que facilitarán la predicción posterior de alteraciones relacionadas con la salud y el bienestar animal, y el Big Data, que nos permite compilar y analizar datos que serán imprescindibles en la toma de decisiones.
Herramientas todas ellas que han llegado para quedarse y que contribuyen, entre otros, a:
- Obtener información sobre hábitos y comportamientos relacionados con la salud, permitiendo establecer patrones de conducta y contribuyendo a la mejora de la salud y el bienestar animal.
- Facilitar la labor de los veterinarios, ofreciéndoles una información de valor que les permitirá predecir y prevenir ciertas enfermedades de forma más rápida y eficaz.
- Mejorar y facilitar el contacto con los propietarios de las mascotas.
- Permitir la identificación visual y electrónica y la monitorización de los animales de granja.
- Gestionar la alimentación, reproducción y el seguimiento del estado de salud de los animales de abasto.
- Automatizar y controlar actividades en granja, como el ordeño.
- Crear bases de datos de granjas que permitan establecer sistemas de referencia para determinados parámetros productivos.
- Tipificar genéticamente a los animales, seleccionándolos por parámetros relativos al bienestar animal y la productividad, entre otros.
- Implementar sistemas de trazabilidad o seguimiento del origen de los alimentos y sus sistemas de producción en granja en un contexto “De la granja a la mesa”.
Mucho por avanzar
Si bien en medicina humana la Inteligencia Artificial está bastante avanzada, con temas de machine learning, deep learning y el uso de métodos y algoritmos que permiten resolver problemas complejos, automatizar tareas y razonamientos, integrar información y asistir en la toma de decisiones, en medicina veterinaria aún queda mucho por hacer en esta área. En este sentido la formación y la creación de equipos interdisciplinares serán clave.
Aun así, hoy en día ya están en marcha programas que evalúan el riesgo de entrada de enfermedades como la PPA en granjas, monitorizan la frecuencia de procesos endémicos y permiten la gestión de brotes de la enfermedad. También existen sistemas de alerta en tiempo real para la vigilancia de enfermedades, como es el caso de la Influenza Aviar.
Sin embargo, la IA facilitará cada vez más el análisis de sistemas epidemiológicos, permitiéndonos identificar cepas bacterianas ambientales con alto potencial infeccioso o predecir la existencia de presuntos reservorios y vectores. También su uso facilitará la detección de casos de enfermedad, dando paso a la medicina individualizada de precisión y permitirá identificar las medidas de control más adecuadas de acuerdo con las características locales y territoriales.
Por otra parte, el uso combinado de sensores, Big Data e Inteligencia Artificial en las explotaciones ganaderas (Smart Farming) cuenta entre sus ventajas con un ahorro de costes por predecir y reducir de forma fiable el riesgo de que los animales padezcan determinadas enfermedades que merman su producción, además de ayudar en la toma de decisiones, lo que tiene un impacto directo en la rentabilidad de las explotaciones. Sin olvidar su vertiente de contribución a la sostenibilidad de las producciones (p.e a través de un uso más racional de los recursos hídricos).
También el sector mascotas está avanzando en el uso de estas tecnologías: sistemas basados en inteligencia artificial que permiten encontrar mascotas perdidas, collares inteligentes que detectan cambios en el estado de ánimo de los perros, o dispositivos varios que monitorizan su actividad y el consumo de agua y/o alimento, como indicativo de posibles alteraciones en su estado de salud.
Algunas de las aportaciones de Zoetis
Dentro de las innovaciones de la compañía en el Continuum of Care (Cuidado integral de la salud animal), concretamente en el área de la predicción, destaca Clarifide Plus. Se trata de la primera evaluación genómica en vacuno de leche disponible comercialmente y permite a los productores clasificar a los animales según los rasgos que afectan al rendimiento, la salud y el beneficio, facilitando la toma de decisiones y aumentando la productividad. En concreto, proporciona información de un total de ocho rasgos de bienestar en vacas, tres rasgos de bienestar en terneros y tres rasgos de fertilidad. Está basada en el Dairy Wellness Profit Index (DWP$) y puede ayudar a los productores a seleccionar las mejores novillas a criar, priorizando así sus inversiones e incrementando su rentabilidad.
En el área de la detección, en el sector de los animales de compañía, destacar una nueva solución diagnóstica impulsada por Inteligencia Artificial que emplea una combinación de imagen, tecnología de reconocimiento, algoritmos e inteligencia artificial basada en la nube para entregar resultados rápidos de diagnóstico en las clínicas veterinarias.
Finalmente, en el campo de la sanidad avícola, Zoetis, a través de Embrex ofrece equipos de última generación para la vacunación in ovo que han evolucionado para ofrecer una mejor protección contra las infecciones de las aves. Sistemas que permiten optimizar la efectividad de la vacunación, incrementar la protección de sus aves y mejorar sus parámetros productivos.